Sabemos que tenemos que tomarnos la vida con más calma, intentar disfrutar del día a día y no tomarnos tan en serio cosas que, en el fondo, no tienen tanta importancia. Pero, qué fácil es decirlo y qué difícil hacerlo, ¿verdad? Es por eso que la cosmética consciente ha entrado con fuerza a nuestras vidas. Y te avisamos, ha llegado para quedarse.
Hay muchas técnicas para intentar mantener el estrés a raya y nosotros ya te hemos hablado de la que mejor conocemos, el mindfulness. Saber meditar es todo un arte y cuesta mucho aprender y tomarlo cómo hábito. Por eso, hoy te traemos otra manera de “meditar” y, poco a poco, ir aplicando la atención plena a tu vida.
La cosmética consciente y su relación con los rituales
A estas alturas casi todos hemos asimilado que el estrés psicológico continuado puede ser perjudicial para nuestra salud. Es más, aún cuando no llega a causar o empeorar un daño médico, también puede fastidiarnos causando estragos en nuestra piel.
Los pequeños rituales pueden ayudarte a comenzar. Tu cerebro los asociará con “un momento para desconectar, para ti” y te será más fácil de conseguir. Un extra de cuidado para tu mente. Si conviertes algunos instantes de tu rutina diaria en tu pequeño ritual, ese momento tan tuyo, con el que tanto desconectas y que tanto te gusta; te será mucho más fácil mantener esa rutina de cuidado en el tiempo.
Además, esta manera zen de usar la cosmética puede ayudarte a optimizar su eficacia, ya que aporta un plus a la restauración de la función barrera de la piel y de su bienestar. En Unavida nos gusta llamarlo “micro-meditación”. Y es que para aprovechar los beneficios de la meditación no hace falta pasar una hora sentado en silencio escuchando tu respiración. Con esta técnica irás aprendiendo, poco a poco y sin darte cuenta, a prestar toda tu atención a las cosas que haces. ¡Concéntrate, relaja tu mente y favorece el bienestar de tu piel!
Comprender el arte de la cosmética consciente te ayudará a ejercitar todo esto día a día sin que te des cuenta. Y para ayudarte a empezar, te proponemos este pequeño ritual: incienso, música relajante, masaje, atención plena y sensaciones. No hace falta que pases 2 horas, si te apetece, perfecto, pero si no, con el tiempo que tardes en limpiarte la cara y aplicarte tus productos habituales es más que suficiente.
La importancia del olfato en el ritual que te proponemos
Los olores pueden desencadenar emociones y promover ciertos estados emocionales en nosotros, ya sean buenos o no tan deseables. Son capaces de activar las regiones del cerebro que se encargan de las emociones y de los recuerdos. Y es por eso que tienen una conexión tan estrecha.
En Unavida nos gusta aprovechar toda la sabiduría de nuestro cuerpo y de la naturaleza para conseguir la mejor versión de nuestra piel. Por eso, te animamos a que saques partido de las fragancias. No solo mediante los olores que incorporamos en nuestros productos y que pueden transportarte a lugares maravillosos, sino también a través del aroma del ambiente. Asocia ciertos olores con tranquilidad, relax y bienestar. Así, te será más fácil centrarte en el cuidado de tu piel.
Cada sentido importa y para el oído esta es nuestra propuesta
La música está íntimamente relacionada con nuestros cerebros. Estimula áreas involucradas en el placer, en las sensaciones (buenas y malas) y en los centros de recompensa. Así, ciertos sonidos o canciones pueden reducir la cantidad de cortisol (hormona desencadenante del estrés) o incluso aumentar la cantidad de prolactina (hormona que causa una sensación de consuelo en nuestra mente).
Y es precisamente eso lo que debes conseguir. Selecciona bien las canciones a incluir en tu “Playlist de Bienestar” y dale un chute de “que bien me siento” a tu cerebro. Si no tienes aún tu playlist, puedes usar una de las que te propones nosotros o entrar en nuestras listas compartidas de Spotify.
Para el tacto, nada mejor como un buen masaje
El tacto puede ser una forma más de comunicación. Es una de las más avanzadas y más poderosas. Dice tanto con tan poco. Y es que a quien no le gusta una caricia…
Los pediatras conocen desde hace tiempo la importancia de las caricias y los masajes a los bebés. Y si es bueno para un bebé, imagínate para tu piel. Para ella, es igual de beneficioso recibir un buen masaje o una caricia. Qué mejor manera de hacerlo, que aprovechando tu rutina de cuidado y aplicando tus cosméticos con suaves masajes y caricias. Además de estimular tu piel, ayudarás a que la crema se absorba más rápido.
Nuestra propuesta de ritual para iniciarse en la cosmética consciente
Y por fin… llegó tu momento, es hora de poner todo esto en práctica. Y para que te animes a probarlo te proponemos un reto. Durante una semana, cuando acabes el día, haz este pequeño ritual con tu rutina de cuidado. Al final de la semana compara tu piel y estado general con el inicio y cuéntanos qué tal te ha ido. No te vamos a engañar, los resultados no son milagrosos, ojalá fuera tan fácil. Pero poco a poco si irás notando diferencia. ¿Aceptas el reto? 😉
1.- Enciende una barrita de incienso de olor muy suave, que te resulte agradable y a ser posible de los que no hacen humo. Si no tienes incienso a mano, puedes sustituirlo por palitos aromáticos o alguna esencia suave que te resulte placentera.
2.- Pon una lista de reproducción con aquellas canciones que te ayudan a relajarte al final del día. Puede ser música específica de relajación, pero si eso no te va, simplemente pon música que sabes que te calma.
3.- Con cada producto que te apliques sobre la piel, date un pequeño y suave masaje. Recréate en lo agradable del contacto y ¡disfruta de tu momento spa casero!
4.- El último paso, en realidad tienes que hacerlo durante todo el ritual. Concéntrate en todo el proceso y en cada paso que estás dando. Presta atención a tus sensaciones y a cómo responde tu piel y tu mente con cada uno: ¿el olor y la música me gustan? ¿Creo que me ayudan en algo? ¿mi piel se siente cómoda al aplicar esta crema concreta? Parece sencillo pero al principio te va a costar un poco. Tranquil@, es normal, nos ha pasado a tod@s. Si la mente se te va a otros pensamientos y vuelves a hacer las cosas por inercia, no pasa nada. Cuando te des cuenta reconduce tu atención y sigue con tu momento, con tu pequeño ritual de autocuidado.
Así que, ya sabes: cuida tu piel, busca su bienestar, relájate y… luce una piel de escándalo. No habrá selfie que se te resista 👏 👏👏. ¡Ah, y bienvenid@ a la cosmética consciente!
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