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“Si tienes una piel grasa, debes usar productos oil-free”. Seguro que has oído estas palabras en más de una ocasión y la verdad es que, de primeras, parece que tiene bastante sentido, ¿verdad? Sin embargo, como se suele decir, no es oro todo lo que reluce. En realidad, no necesariamente un producto oil free debe ser bueno para una piel grasa. Por desgracia, es algo más complicado.
¿Qué significa cosméticos o productos oil free?
Quizás debería empezar por matizar el significado de oil free. Muchas veces, el idioma de la industria cosmética y el del consumidor no se parecen tanto como creemos. Entendemos cosas distintas de las mismas palabras y algunos laboratorios cosméticos se aprovechan de ello. Como ya imaginarás, la alegación de la que hablamos hoy, es una de esas situaciones.
Ahora ya no está tan de moda, pero hace algún tiempo, en prácticamente todos los cosméticos ponía estas palabras. ¿Por qué? Precisamente porque estaba de moda y los consumidores pedían constantemente este tipo de productos. Por eso, muchos laboratorios se subieron al carro, sin interesarles explicar bien qué significaban exactamente estas palabras. Al fin y al cabo, las ventas son las ventas…
En realidad, estas palabras no significan que el producto en cuestión no contenga aceites. Tiene un matiz a mayores que hace que el concepto del producto cambie radicalmente. Oil free significa que el producto no contiene aceites… minerales. Nada más. Es decir, que el producto puede contener mucha cantidad de aceites vegetales de cualquier tipo o una fase grasa muy abundante; e incluso, oclusiva, con lo que podría no ser la mejor opción para una piel grasa.
¿Qué son los aceites minerales?
Los aceites minerales son aquellos derivados del petróleo, como las parafinas, o las vaselinas líquidas. Son bastante oclusivas y por eso pueden funcionar muy bien para cierto tipo de productos de acción rápida y pasajera. No obstante, al producir oclusión, también pueden no ser apropiadas en gran cantidad para pieles con exceso de grasa y/o tendencia al acné.
Hay productos que no llevan aceites minerales y que, sin embargo, pueden aportar un exceso de grasa o una capa muy oclusiva para cierto tipo de pieles. Por eso, tienes que fijarte tanto en la composición, como en la textura del producto.
Si tienes piel grasa fíjate en la textura y en los primeros ingredientes del producto
Sobre la textura, deberías evitar las untuosas. Fíjate que sea ligera y, sobre todo, que, cuando te la apliques, la emulsión se rompa rápidamente, dejando una sensación ligera en tu piel. Hay cremas que, tras aplicarlas, te dejan una sensación como de tener algo en la cara. A algunas personas les encanta esta sensación de “notar” la crema, pero si tienes la piel grasa, debes evitar este tipo de productos.
Ya en los ingredientes, hay que fijarse tanto en el ingrediente, como en su posición. Ojo, no hablamos de ingredientes que puedan taponar los poros, eso es otra cosa. Lo que queremos destacar es que si en tu crema hay muchos ingredientes grasos o incluso oclusivos, puede empeorar tu problema de brillos o los odiados granitos.
Por norma general, aunque ya sabes que siempre hay excepciones que confirman la regla, debes evitar aquellos productos faciales que, en posiciones muy altas del listado, contengan parafinas o vaselinas (no encontrarás muchos). También aquellos que contengan Dimethicone en posiciones altas, porque puede resultar bastante oclusivo. Finalmente deberás evitar aquellos productos con muchas mantecas (butter), lanolin o incluso cera alba o beeswax si están en posiciones muy altas. Con posiciones muy altas, me refiero a los tres primeros ingredientes del listado.
¿Has cambiado de idea con respecto a los productos oil free? Como ya has visto, no siempre las cosas son lo que parecen a primera vista y, por desgracia, siempre habrá marcas que se aprovechen de ello. Por eso, creemos que es importante que elijas productos de empresas en las que realmente confíes. Marcas que siempre te explicarán todo, aunque no siempre vaya a encajar en tus preferencias para así elegir siempre el producto más adecuado para tu piel, o simplemente con el que te sientas más cómodx.
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